Grupos “posiblemente neonazis” cubrieron de pintura y mensajes antiderechos su trabajo artístico, pero la Colectiva de Mujeres Muralistas en la capital de Colombia, Bogotá, ha vuelto a pintar sus murales las veces que ha sido necesario
Por Dunia Orellana y Dennis Arita
Foto: Colectiva de Mujeres Muralistas
Bogotá, Colombia. Han tenido que pintar sus murales feministas al menos siete veces en la Galería Transfeminista Siempre Vivas, en Bogotá, porque manos criminales machistas mancharon la labor artística con mensajes fundamentalistas y antiderechos.
Según la denuncia publicada en redes sociales por la Colectiva de Mujeres Muralistas, supuestos grupos neonazis cubrieron de pintura y mensajes como “¡Soy provida!” los murales pintados por la Colectiva en la 26 con 30, donde se encuentra la galería.
La repudiable acción antiderechos se ha repetido siete veces desde 2020 en la Siempre Vivas. El sexto ataque contra el espacio de expresión artística de esta nueva exposición ocurrió el 31 de agosto de 2022, cuando los atacantes cubrieron los murales de pintura y además amenazaron a las mujeres muralistas.
El séptimo acto de rechazo contra la galería tuvo lugar el 9 de octubre de este año, cuando los grupos antiderechos mancharon la parte frontal de los murales y escribieron amenazas.
El espacio artístico se halla en una zona reconocida de la capital colombiana por haber sido considerada durante mucho tiempo una de las más peligrosas para las mujeres y disidencias sexuales bogotanas, quienes han sufrido violencias al transitar por el puente y los sitios vecinos, que abarcan unos 400 metros cuadrados de espacio urbano.
“Este es uno de los puentes más centrales de Bogotá y el trabajo que hemos hecho allí ayuda a identificar esas violencias y mitigarlas”, dijo a Reportar sin Miedo una de las integrantes de la Colectiva de Mujeres Muralistas, Natalia González.
Para la feminista y artista colombiana, este ha sido un espacio de encuentro cultural en donde han realizado muestras de música, gastronomía, ferias, teatro, podcasts y videojuegos, lo que fortalece un ambiente de paz y seguridad.
“De las violencias que sufrimos las mujeres y disidencias sexuales y de género, este acto significa una violencia simbólica y también física por parte de los grupos que hacen la censura y también significa violencia institucional por parte de las instituciones distritales y nacionales que no responden garantizando derechos en esta situación”.
“La galería empezó a vivir agresiones simbólicas y censura por parte de grupos fascistas que fueron escalando hasta agresiones físicas y robos. Ultraderechistas borraron la parte frontal de la galería transfeminista, renovada hace sólo unos días”, denunció la Colectiva en Twitter.
Los murales permanecieron intactos hasta que, según la Colectiva, “empezaron a hacerse imágenes alusivas a violencia sexual, ejerciendo violencia simbólica contra las mujeres muralistas”.
No las callarán
La organización artística feminista agradeció en redes sociales a quienes la han apoyado con “mensajes, comunicados, videos, denuncias, donaciones, materiales, notas de prensa, abrazos, música, derechos humanos”, y aseguró que, a pesar del hostigamiento, no se callarán, ya que “el arte transforma la sociedad”.
Las muralistas han dibujado a líderes feministas y defensoras del territorio de Latinoamérica como las colombianas Cristina Bautista, Lala Switch, Laura Weinstein, Betsabé Espinal, la mexicana y comandante Ramona de Chiapas, la boliviana Bartolina Sisa y la hondureña Berta Cáceres, entre otras.
Las acciones de los grupos vandálicos en meses recientes no han desanimado a las integrantes de la organización feminista colombiana. Por el contrario, las mujeres artistas han vuelto a pintar las veces que ha sido necesario los murales manchados por grupos antiderechos en ese sector bogotano.
La Colectiva no abandona su esfuerzo artístico en la que llaman “la primera galería al aire libre de Latinoamérica”, ya que es parte de su trabajo para recuperar espacios urbanos en la ciudad de Bogotá, como el de la Galería Transfeminista Siempre Vivas, que han sido secuestrados por la violencia o el abandono.
Desde 2019, la Colectiva se ha enfocado especialmente en combatir por medio del arte las violencias contra las mujeres que tienen lugar en el puente de la 26 con 30, así como en las zonas vecinas.
Desde hace tres años, publicó la Colectiva en sus redes sociales, el lugar “se convirtió en un territorio donde mujeres y disidencias sexo-género construimos paz para nosotres alrededor del arte sonoro, teatral, deportivo, gastronómico, digital”.
Sin embargo, los grupos antiderechos han querido pisotear el arduo y valioso trabajo de la Colectiva de Mujeres Muralistas por medio de acciones vandálicas al manchar con pintura y mensajes de rechazo las obras de arte que cubrían esta zona olvidada por los políticos.