La policía capturó a Andy García por suponerlo responsable del asesinato de Jessica Vallecillo Cruz. Hay que hacer analizar lo que llevó al supuesto asesino a cometer este acto violento, según la psicóloga Kate Orellana
Por Amelián Zerón
Jacaleapa, El Paraíso. Las quemaduras en todo el cuerpo acabaron con la vida de Jessica Vallecillo Cruz, de 21 años, en Las Majadas, El Paraíso, oriente de Honduras, el 15 de enero de 2023. Por su muerte, las autoridades responsabilizan a Andy García, de 56.
García llegó a la casa de Cruz por la madrugada e inmediatamente comenzó a pelear con ella. La reyerta terminó con Jessica en grave estado de salud después de sufrir graves quemaduras.

Cruz pidió ayuda a gritos, dijeron los vecinos de la zona, pero nadie se acercó. La mujer salió de su vivienda y cayó sobre la acera con el cuerpo cubierto de quemaduras que le causaron la muerte.
El supuesto hechor está tras las rejas por el asesinato de Cruz luego de ser capturado por las fuerzas policiales en la colonia Betania, Tegucigalpa.
Debido al ataque supuestamente cometido por García, la joven sufrió alteraciones en el corazón y los riñones, además de deterioro neurológico, deshidratación severa y quemaduras que acabaron con su vida.
Cruz, originaria del municipio de Ojo de Agua, era madre de un niño de un año de edad y tenía muchas metas por cumplir.
Quería verla sufrir
El caso de Jessica Cruz se suma a las múltiples muertes violentas de mujeres registradas en lo que va de 2023. “Van 26 feminicidios al día de hoy, 25 de enero”, lamentó Ana Ruth García, de Ecuménicas por el Derecho a Decidir, durante las marchas de las organizaciones por el Día de la Mujer. “Exigimos un alto a la impunidad y elegir para la Corte Suprema a hombres y mujeres que apliquen la justicia”.
Por otra parte, entre 2002 y agosto de 2022, más de siete mil mujeres han muerto de manera violenta en Honduras, según datos del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh).
La muerte de Jessica ocurre en un país donde casi seis de cada diez casos de violencia doméstica desde 2017 hasta hoy son parte de la mora judicial en el país, según el Centro de Derechos de Mujeres (CDM).

En un caso como el de Jessica es necesario hacer análisis y estudios que determinen lo que llevó al supuesto asesino a cometer este acto violento, según la psicóloga Kate Orellana.
“Primero se tiene que hacer un estudio de la persona que realizó esa acción, ya que puede ver un trasfondo más allá de eso, como posibles problemas mentales. Al quemarla se puede apreciar que quería ver sufrir a Jessica”.
Orellana reconoce que el sistema heterocispatriarcal está afectando a las mujeres hondureñas.
“Honduras es un país sumamente violento para las mujeres. En la mayoría de los crímenes no solo se las mata, sino que se las hace sufrir antes de eso”.