Sequía, cultivos destruidos y más migración son los efectos de la extrema ola de calor que azota a Honduras, Centroamérica y México. “Terrorífico y apocalíptico”, llama al panorama actual la defensora de territorio Miriam Miranda
Por Dunia Orellana y Dennis Arita
Foto principal del Twitter de Miriam Miranda
San Pedro Sula, Honduras. Inseguridad alimentaria y aguda escasez de agua podría causar la sequía meteorológica en Honduras. La crisis climática obligó al gobierno de Honduras a decretar alerta roja ayer en 140 municipios del país.
Además de los daños en cultivos y las bajas reservas de agua, el fenómeno podría disparar el número de hondureños que deciden migrar.
“La alerta roja es por deficiencias de lluvias de un 40 por ciento a nivel nacional y afecta los medios de vida como la reducción del suministro de agua para el consumo humano en algunos sectores del país”, dijo Juan José Reyes, del Sistema de Alerta Temprana (SAT).
Los municipios más perjudicados por el fenómeno pertenecen al “corredor seco” en los departamentos Francisco Morazán, La Paz, Choluteca y Valle, según el Sistema Nacional de Gestión de Riesgo (Sinager).
El anuncio de alerta del Sistema Nacional de Gestión de Riesgo (Sinager) abarca 140 municipios debido a la sequía asociada al fenómeno de El Niño.
Ese fenómeno climático causa una disminución en la producción de granos básicos, lo cual podría originar inseguridad alimentaria en varias zonas de Honduras, señalan los expertos.
Según la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias, al menos 101 municipios pasan a alerta amarilla. Entretanto, 54 siguen en alerta verde.
La sequía ya ha causado varios desastres ambientales en Honduras, como incendios en la reserva forestal de La Tigra, a inicios de año.
Al panorama “terrorífico y apocalíptico” en Honduras, según la defensora de territorio Miriam Miranda, se suma el desastre en el río Cangrejal, en La Ceiba, norte del país. “¡Se secó el Cangrejal”, escribió Miranda en redes sociales. La “Ceiba se queda sin fuente de agua”.
¿Por qué el calor y qué hacer?
“Domo de calor” llaman los medios de comunicación al fenómeno que está elevando las temperaturas a niveles extremos.
El fenómeno perjudica especialmente a México y Centroamérica. En estas regiones, la temperatura ha estado superando en ciertos días los 40 grados centígrados.

Entretanto, en Ciudad de México, la ola de calor se ha disparado a temperaturas cercanas al récord máximo registrado. Ayer, por ejemplo, se acercaron a los casi 39 grados alcanzados en 1998.
Parecidas temperaturas se han pronosticado para zonas de Centroamérica y el Caribe. Como en Honduras, en algunas regiones del Caribe las autoridades han emitido “alertas de calor excesivo” por la sensación térmica superior a los 40 grados.
Ante la emergencia por la crisis climática en Honduras, los medios citan las recomendaciones de especialistas en salud.
Autoridades de otros países afectados por la ola de calor recomiendan tomar agua con limón y una pizca de sal.
Por medio de esa simple preparación esperan que la ciudadanía recupere los electrolitos perdidos por la sudoración excesiva.
Por otra parte, aconsejan hidratarse cuando sea conveniente, preferiblemente con suero y bebidas refrescantes sin azúcar.
Crisis climática dispara migración
“Luchar contra el impacto creciente de la emergencia climática en favor de las personas desplazadas”, ha pedido esta semana el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
El llamado de Acnur coincide con el momento de riesgo actual que corren Centroamérica, México y el Caribe debido a la extrema ola de calor como efecto de la crisis climática.
En estos países, el “domo de calor” generado por la crisis climática hace peligrar los cultivos y las reservas de agua. Por esa razón, las autoridades hondureñas lanzaron ayer la alerta roja por sequía meteorológica en 140 municipios del país.

El aumento del número de personas desplazadas es otro de los efectos de la crisis climática que azota en estos días a Centroamérica y México.
Con el fin de favorecer a las y los desplazados debido a los desastres causados por la crisis climática, Acnur anunció más acciones de asistencia y protección.
La oficina espera por este medio ayudar a muchas personas “refugiadas y desplazadas por los efectos del cambio climático”, según su sitio web. “Además, las ayuda a ser resilientes en caso de futuros desastres”.