El Día Internacional de la Mujer Indígena sirvió para celebrar los logros del proyecto Pana Pana. La iniciativa ha formado a cientos de mujeres y familias en técnicas agrícolas y emprendimiento
Por Roberto Mejía
La Mosquitia, Honduras. El Proyecto Pana Pana de la Cooperación Alemana para el Desarrollo (GIZ) ha logrado que 841 mujeres implementen nuevas técnicas en producción agrícola y que 474 mujeres indígenas establezcan huertos diversificados en La Mosquitia.
Ayer, Día Internacional de la Mujer Indígena, fue una ocasión memorable para celebrar estos y otros logros del proyecto ejecutado en consorcio con GOPA-GOAL.
Entre sus principales propósitos, Pana Pana busca afianzar la seguridad alimentaria de las familias, cosechando alimentos sanos y ricos en minerales y vitaminas.
Por medio de la iniciativa alemana, unas cien familias de 16 comunidades se unen al mercado indígena mediante la capacitación de 600 productores y productoras, de los que 420 son mujeres.
Los productos que cosechan las personas beneficiadas en La Mosquitia incluyen yuca, plátanos y granos. También obtienen frutas de temporada, leña, hortalizas, aceites y artesanías.

Pana Pana, contra la desigualdad
Desde el año 2020, Pana Pana trabaja con mujeres miskitas en Puerto Lempira y Ramón Villeda Morales para lograr la seguridad alimentaria.
El proyecto busca la gestión sostenible de los recursos en las poblaciones rurales indígenas afectadas por la inseguridad alimentaria.
Pana Pana trabaja contra las desigualdades y la discriminación en La Mosquitia. En especial se enfoca en mujeres y jóvenes a quienes por tradición no dejan tomar decisiones sobre manejo de bosques. Tampoco participan en organizaciones indígenas.
La desigualdad se rompió en 2022, cuando Nora Trino se convirtió en la primera mujer presidenta de los Concejos Territoriales Indígenas (CTI).
“Antes de que llegase Pana Pana al territorio, todos los presidentes eran hombres. Con apoyo del proyecto nos capacitaron y me dieron una aceptación muy fuerte como líder mujer”, afirmó Trino.
Asimismo, según Carmen Richar, de la comunidad de Umru, con Pana Pana se les dio asesoría técnica para conservar las semillas locales. Además, las capacitaron para hacer huertos familiares. “Ahora sembramos cosechamos y vendemos el excedente”, dijo Richar.

Primer mercado indígena
Unas 134 mujeres participan en el primer mercado indígena financiado por Pana Pana que ayuda a vender productos agrícolas en La Mosquitia.
Nethy Sudia, de la comunidad de Mavita, primera presidenta del mercado, recibió capacitación del proyecto en emprendimiento, roles, liderazgo, elaboración de aceite y bisutería.
“Ser la presidenta del primer mercado construido por Pana Pana me llena de orgullo”, comentó Suthia.
