ONU Honduras y la Unión Europea presentaron el informe que mide la tolerancia a este tipo de violencia que en apenas cuatro meses de 2022 ha dejado 109 feminicidios
Por Luis Vallecillo
Tegucigalpa, Honduras. Como una apuesta pionera para identificar las normas sociales que producen y reproducen la violencia contra mujeres, niñas y adolescentes se presentó un nuevo estudio lanzado el 3 de mayo por la iniciativa Spotlight.
La iniciativa ofreció a la opinión pública el Estudio de tolerancia social e Institucional a la violencia contra las mujeres, niñas y adolescentes en Honduras con el objetivo de medir los niveles de tolerancia social e institucional a este tipo de violencia.
En la Presentación del Estudio de Tolerancia a Violencia contra Mujeres, Adolescentes y Niñas de #SpotlightHN, se desarrolla un rico espacio en el que participan la Cooperación Internacional, Gobierno y Organizaciones de Sociedad Civil #FinDeLaViolencia @UEenHonduras @ONUHonduras pic.twitter.com/Kkhci3N7HN
— Iniciativa Spotlight (@SpotlightAmLat) May 3, 2022
“Tenemos muy claro que la violencia contra mujeres y niñas es una de las grandes pandemias que requieren un esfuerzo de todos y todas. Es una de las violaciones de derechos humanos más persistentes y devastadoras del mundo”, dijo la coordinadora residente de Naciones Unidas en Honduras, Alice Shackelford.

Además de Shackelford, en el evento participaron la designada presidencial Doris Gutiérrez; el embajador de la Unión Europea, Jaume Segura; la secretaria de Asuntos de la Mujer, Doris García, y la representante del Grupo Nacional de Referencia Sociedad Civil de la iniciativa Spotlight, Jessica Sánchez.
Van casi 109 feminicidios
Shackelford opinó que Honduras todavía no sale de la violencia, ya que en apenas el primer tercio del año ya se registran “prácticamente” 109 asesinatos de mujeres. “Ya no están aquí con nosotros y ya no pueden participar en el desarrollo económico y social de Honduras”, dijo sobre la mujeres que han muerto violentamente en lo que va de 2022.
Por otra parte, el estudio permitirá formular, con base en la evidencia, estrategias de comunicación para el desarrollo enfocadas en cambios de normas sociales y de comportamientos, así como impulsar políticas públicas y fortalecer las instituciones públicas y privadas.

“Estamos conjuntamente para trabajar en una alianza con el sector privado, organizaciones basadas en la fe, sindicatos y municipalidades”, agregó Alice Shackelford.
La coordinadora mencionó otros esfuerzos para consolidar la fortaleza de las iniciativas, como la transformación del Instituto Nacional de la Mujer en Secretaría de la Mujer. Consideró que se trata de un “logro importantísimo para Honduras” y celebró esta decisión de la presidenta Xiomara Castro y del gabinete de ministros.
Esperan informes concretos
Las normas sociales que aparecen en el documento de Spotlight incluyen los roles rígidos de género, la apropiación del cuerpo, el control masculino sobre el comportamiento femenino y la misoginia.

“Hemos impulsado varias leyes, algunas se han aplicado en alguna medida y otras no”, dijo la designada Doris Gutiérrez. “Presentamos varias iniciativas, como la ley de presupuesto con enfoque de género. Fue una lucha que nosotras hicimos con las organizaciones de mujeres, con Naciones Unidas, con las compañeras campesinas. Tengo confianza en la ministra de la Mujer de que ahora sí nos va a dar informes concretos sobre cómo el presupuesto se está utilizando en gran medida para los proyectos con las mujeres”.
El análisis de alcance nacional fue presentado por el investigador principal de la empresa Sayara Internacional, Gianluca Giuman. A partir del estudio se podrán formular con base a evidencia políticas públicas y estrategias de comunicación enfocadas en el cambio de normas sociales y comportamientos nocivos que perpetúan estas violencias.
Guman explicó que las normas sociales son códigos de conducta que se generan a través de procesos de socialización, los cuales condicionan el comportamiento de las personas en base a expectativas y a través de los mecanismos de sanción social. Entretanto, la tolerancia social a la VCMNA se refiere al nivel en el cual las personas aceptan, normalizan “actúan contra las distintas formas de violencias que afectan mujeres, niñas y adolescentes”.

“Me llama la atención la intolerancia social e institucional de toda la sociedad. De alguna manera somos tolerantes ante unos datos que deberían ser intolerables y básicamente cada día van en aumento”, señaló el embajador de la Unión Europea, Jaume Segura.